En algunas ocasiones, los problemas de seguridad de la empresa vienen desde dentro. Esto es debido a que más allá de tener un problema con un ataque informático, son los propios empleados de la empresa los que cometen determinados errores que terminan por facilitar la tarea a los delincuentes informáticos. Esto es algo que no debe de ocurrir y que además, con una buena praxis, se puede corregir.
Comprobaciones de seguridad en el puesto de trabajo
Vamos a ver algunos de los errores de seguridad más comunes en el puesto de trabajo para poner las medidas necesarias, tratando de que no vuelvan a ocurrir.
La contraseña
Un clásico de los empleados olvidadizos es el apuntar su contraseña en un post-it. Por culpa de esto, la contraseña se vuelve pública y por lo tanto, es mucho más sencillo que alguien indeseado acabe entrando donde no debía.
Bloquear el ordenador
Siempre que uno se encuentre trabajando en su ordenador, este podrá asegurarse de que nadie más lo está utilizando. Sin embargo, si abandona el puesto de trabajo, ya sea porque se va a casa o porque hace un descanso, es necesario bloquearlo para evitar el acceso de terceros.
La información
Por otro lado, hay que tratar de evitar compartir información o contraseñas de la empresa a través de teléfonos, internet u otros dispositivos. Nunca sabemos quien puede estar escuchando al otro lado, por lo que podríamos estar poniendo en peligro la seguridad del negocio.
Complejidad
La contraseña debe de ser siempre compleja. A pesar de que al empleado no le pueda gustar porque tiene que aprenderse una contraseña más complicada, una contraseña compleja es clave para una buena seguridad dentro de la empresa.
Utilizar herramientas autorizadas
A la hora de utilizar servicios de terceros, como por ejemplo una nube en donde guardar la información, nos tenemos que asegurar que se trate de una empresa autorizada por la empresa. A la hora de confiar los datos del negocio a un tercero, no se puede confiar en cualquiera, ya que depender de un tercero desconocido, puede suponer un problema a largo plazo sobre todo si se trata de información sensible.