El buen funcionamiento de una empresa, repercute positivamente en la satisfacción de los clientes. De esta forma, un cliente satisfecho es bastante probable que contrate de nuevo los servicios de nuestra empresa, generando así un círculo de confianza, beneficioso para ambas partes. Para conseguir esta satisfacción de sus clientes, cada vez son más las empresas que apuestan por una metodología ITIL gracias a las ventajas de esta.

itil

Básicamente, a través de la metodología ITIL se monitoriza la empresa y por lo tanto, resulta mucho más sencillo el poder gestionar todos los procesos que se encuentren relacionados con las tecnologías de la información, ayudando a crecer a la compañía y también mejorando el trato con sus clientes.

Gracias a ITIL, es posible mejorar diferentes aspectos dentro de una empresa

Al llevar a cabo este servicio de monitorización, es mucho más sencillo el saber los aspectos en los que la empresa puede mejorar y, por lo tanto, prestar una mayor atención a estos. Además, gracias a estas mediciones, es mucho más sencillo el determinar el nivel de satisfacción del usuario, sabiendo entre otras cosas, si nuestro cliente se encuentra atendido dentro de un rango establecido y por supuesto, si la atención recibida ha sido eficaz.

La metodología ITIL ayuda a las empresas, además de mejorar la satisfacción del cliente, a reducir costes o la mejora del funcionamiento de su IT. Gracias a la implantación de la metodología ITIL, lograremos mejorar la comunicación en la empresa, aumentar la calidad de la misma y también minimizar los riesgos a los que estamos expuestos.

Todo esto se traduce en un aumento de la satisfacción de cliente, gracias a los servicios de nuestras IT. En definitiva, con la metodología ITIL nos estamos asegurando el disponer de un sistema de clase mundial a través del cual podemos desarrollar nuestros procesos, asegurándonos que nuestros servicios de TI son capaces de cumplir escrupulosamente con los objetivos de la empresa. De esta forma, nos aseguramos que todo funciona correctamente bajo unos estándares exigidos y que, por lo tanto, el cliente pueda estar satisfecho con el servicio realizado.